San Benito es un santo venerado en la iglesia católica cuya historia es conocida como aquel que dedico su vida al servicio de la comunidad y de los sacramentos. Su vida se resume en llevar la palabra y las enseñanzas de los sacramentos. Este es venerado en muchas partes y el mayor porcentaje de su vida lo paso como ermitaño enseñando los designios y los secretos de los libros de la iglesia y el catolicismo.
San Benito fue la persona que dio a conocer la medalla de protección que sirve para revocar y proteger todo acto de maleficio de brujeria y de hechicería que se esté teniendo, este medallón a través del tiempo ha servido para aquellas personas que han sufrido ataques de magia roja, de magia negra, de vudú y de todo rito oscuro. Esta medalla de protección es llamada la medalla de san Benito cuya característica tiene unos rezos en particular.
Si estas sufriendo algún ataque de hechicería o de brujeria nosotros como expertos te recomendamos hacerte al medallón de San Benito para que bloquees y protejas todo acto de brujeria que estén llevando a cabo en contra tuya, esta protección es sumamente efectiva ya que la hemos utilizado en gran cantidad de las protecciones y no solamente quita el acto maligno, sino que también llena de fuerzas y energías a la persona.
Si deseas mayor información de esta protección o quieres reforzar ritualizando este medallón en un lugar especial, comunícate con nosotros que te estaremos no solamente suministrando este medallón, sino que también ritualizando, protegiéndote de todo maleficio y todo acto oscuro y negro.
A continuación, te dejamos la oración. Recuerda tener tu medalla de San Benito para su efectividad, cualquier duda contáctanos que la asesoría es gratis.
Para realizarla en latín debes tener la energía, de una buena manera emite una vibración mucho más fuerte en contra de las energías del mal.
“Crux Sancti Paris Benedicti, Crux Sacra Sit Mihi Lux, Non Draco Sit Mihi Dux, Vade Retro Satana, Non Suade Mihi Vana, Sunt Mala Quae Libas, Ipse Venea Bibas” (que la cruz santa sea mi luz, que el demonio no sea mi amo, retrocede Satan, no persuadirás de cosas malas, lo que me presentas es malo, bebe tus propios venenos).
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